Los pantanos son hábitats húmedos cubiertos de vegetación baja. Consisten en un 95 por ciento de agua y, por lo tanto, son grandes depósitos de agua. Las ciénagas son hábitats en los que se forma más materia orgánica de la que se descompone. Además, las turberas son importantes reservorios de carbono. Casi la mitad del dióxido de carbono en la atmósfera está ligado a los pantanos.